Para el proyecto se han utilizado tecnologías de vanguardia como la fotogrametría, termografía y comparaciones volumétricas, entre otras.
FUENTE: Diario El Mundo
"Una web sencilla, intuitiva y con mucha información en cuatro dimensiones que persigue diagnosticar el estado de conservación, monitorizar las alteraciones identificadas y proponer medidas de conservación preventiva de las pinturas rupestres" son los resultados obtenidos del trabajo que empezó a gestarse a principios de 2013 bajo la dirección del arqueólogo y docente en la Universidad de Castilla La Mancha, Juan Francisco Ruiz.
"Los resultados obtenidos se basan en tecnologías y metodologías de vanguardia, como fotogrametría de objeto cercano, comparaciones volumétricas, fotografía gigapíxel, fotografía multiespectral, tratamiento de imagen mediante descorrelación de espacios de color, análisis geológico y termografía, entre otros", así lo ha explicado Ruiz. Pero otro de los objetivos de esta inicativa que ahora ya es una realidad, según ha mencionado el director, es la divulgación del arte rupestre levantino de estas comarcas y es que en la web se puede acceder a algunos de los productos digitales elaborados, optimizados respecto a su tamaño original para facilitar su visualización a través de cualquier navegador, ya sea un ordenador o un smartphone.
El proyecto 4D VULL ha visto la luz tras algo más de tres años del trabajo desarrollado por José Pereira con la colaboración de Elia Quesada. El proyecto se ha desarrollado entre 2014 y 2016 en las diversas localidades que conforman el Parque Cultural Valltorta-Gassulla y comarcas aledañas hasta la sierra de la Pietat (Ulldecona), todos ellos incluidos en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1998. " El proyecto debe su nombre a la combinación de las dimensiones x, y, z, a las que se les añade la dimensión temporal", ha matizado Ruiz.
La directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga, ha destacado la importancia de este proyecto diciendo que "se ha hecho uso de la tecnología más puntera y revolucionaria con el objetivo de acercar el patrimonio a la ciudadanía y de este modo, poder tener el museo 'en casa'. Así mismo, Amoraga ha explicado que con el motivo del centenario del descubrimiento de las pinturas rupestres, desde Conselleria se están llevando a cabo muchas actividades para el bienio 2017-2018, "que supondrán un cambio radical para el museo". El objetivo, según la directora, será "disfrutar y aprender durante los próximos meses". En lo que a las exposiciones se refiere, ha manifestado que "están pensadas para todos los públicos de todas las edades, desde niños de 5 o 6 años, hasta personas de la tercera edad pasando por los jóvenes y las familias. "Con esta potente aplicación, además de acercar el arte rupestre a la ciudadanía, se pondrá en valor el mismo" y además, "a lo largo del año, se irán presentando los vídeos promocionales, de unos 30 segundos de duración, de los municipios que conforman este parque cultural".
El alcalde de Tírig, Juanjo Carreres, ha manifestado que "pese a que el municipio de Tirig fue el pionero en reclamar esta necesidad y el primero que colaboró en el proyecto, esto es un trabajo coral donde todos los municipios involucrados somos igual de importantes". Carreres también ha aprovechado la ocasión para lanzarle un órdago a Amoraga reivindicándole la necesidad de disponer de un director general del museo de la Valltorta que se encargue de coordinar todas las actividades. La respuesta de la directora general de Cultura ha sido clara y contundente "estamos trabajando en ello, estamos confeccionando la bolsa de empleo y la solución está muy próxima".
Por su parte, el representante de Amics de la Valltorta, Ferrán Monferrer, ha manifestado que "pese a que ahora no sabemos el alcance y repercusión que tendrá este gran trabajo, estamos convencidos de que dentro de muchos años se recordará como un gran paso que cambió la percepción del arte rupestre que, también, engrandeció la cultura".
Equipo de trabajo
El grupo multidisciplinar de investigación que dirige Ruiz se constituyó a principios de 2013 y desde entonces ha estado en constante crecimiento, integrando a más de 15 investigadores y profesionales de distintas áreas: arqueólogos, restauradores, especialistas en imagen digital, ingenieros, geólogos, químicos, biólogos, etc. Sus objetivos son contribuir a la difícil tarea de preservar el arte rupestre, mejorar sus técnicas de documentación e incrementar el conocimiento y divulgación de estas formas de comunicación gráfica de la Prehistoria.
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